La terapia conductual es un término que describe una amplia gama de técnicas utilizadas para cambiar las conductas desadaptativas. El objetivo es reforzar los comportamientos deseables y eliminar los no deseados.
Arraigado en los principios del conductismo, una escuela de pensamiento centrada en la idea de que aprendemos de nuestro entorno, este enfoque surgió a principios del siglo XX y se convirtió en una fuerza dominante en el campo durante muchos años. Edward Thorndike fue uno de los primeros en referirse a la idea de modificar el comportamiento.
A diferencia de los tipos de terapia que se basan en la percepción (como la terapia psicoanalítica y las terapias humanísticas), la terapia conductual se basa en la acción. Debido a esto, la terapia conductual tiende a estar muy enfocada. El comportamiento en sí mismo es el problema y el objetivo es enseñar a las personas nuevos comportamientos para minimizar o eliminar el problema.
La terapia conductual sugiere que, dado que el aprendizaje antiguo condujo al desarrollo de un problema, el nuevo aprendizaje puede solucionarlo.
Beneficios de la terapia conductual
La terapia conductual se usa ampliamente y ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de una serie de condiciones diferentes. La terapia cognitiva conductual, en particular, a menudo se considera el “estándar de oro” en el tratamiento de muchos trastornos, y la terapia cognitiva conductual de juego, específicamente, puede ser efectiva para niños donde otros tipos de terapia no lo son.
La TCC suele ser más asequible que otros tipos de terapia y los resultados suelen verse en 5 a 20 sesiones. Las investigaciones han demostrado que la TCC es más eficaz para el tratamiento de:
- Problemas de ira.
- Ansiedad.
- Bulimia.
- Depresión.
- Trastorno de síntomas somáticos.
- Estrés.
- Abuso de sustancias y prevención de recaídas.
Además, se ha descubierto que la terapia conductual ayuda a las personas con lo siguiente:
- Comunicación.
- Estrategias de afrontamiento.
- Patrones de pensamiento más saludables.
- Autoestima.
Tipos de terapia conductual
Hay varios tipos diferentes de terapia conductual. El tipo de terapia utilizada puede depender de una variedad de factores, incluida la afección que se está tratando y la gravedad de los síntomas de la persona.
El análisis de comportamiento aplicado utiliza el condicionamiento operante para dar forma y modificar comportamientos problemáticos.
La terapia cognitiva conductual (TCC) se basa en técnicas conductuales, pero la diferencia es que la TCC agrega un elemento cognitivo, centrándose en los pensamientos problemáticos detrás de los comportamientos.
La terapia de juego cognitiva conductual utiliza el juego para evaluar, prevenir o tratar los desafíos psicosociales. El terapeuta puede usar el juego para ayudar a un niño a aprender a pensar y comportarse de manera diferente.
La terapia conductual dialéctica (DBT, por sus siglas en inglés) es una forma de TCC que utiliza técnicas conductuales y cognitivas para ayudar a las personas a aprender a manejar sus emociones, lidiar con la angustia y mejorar las relaciones interpersonales.
La terapia de exposición utiliza técnicas conductuales para ayudar a las personas a superar sus miedos a situaciones u objetos. Este enfoque incorpora técnicas que exponen a las personas a la fuente de sus miedos mientras practican estrategias de relajación. Es útil para tratar fobias específicas y otras formas de ansiedad.
La terapia racional emotiva conductual (REBT, por sus siglas en inglés) se enfoca en identificar pensamientos y sentimientos negativos o destructivos. Luego, las personas desafían activamente esos pensamientos y los reemplazan por otros más racionales y realistas.
La teoría del aprendizaje social se centra en cómo las personas aprenden a través de la observación. Observar a otros siendo recompensados o castigados por sus acciones puede conducir al aprendizaje y al cambio de comportamiento.
Cómo empezar
Si está interesado en la terapia conductual, hay algunas cosas que puede hacer para aprovechar al máximo su tratamiento.
Busca un terapeuta conductual
Algunos profesionales de la salud mental que pueden brindar terapia conductual incluyen consejeros, psicólogos, psiquiatras y trabajadores sociales.
Pide recomendaciones
Si no está seguro de dónde comenzar su búsqueda, puede ser útil pedirle una remisión a su médico de atención primaria.
Póngase en contacto con su seguro de salud
Averigüe si su plan cubre la terapia conductual y, de ser así, cuántas sesiones.
Fijar metas
Una vez que comience el tratamiento, discuta sus metas. Saber lo que espera lograr puede ayudarlo a usted y a su terapeuta a crear un plan de tratamiento efectivo.
Sea un participante activo
Para que la terapia conductual sea eficaz, debe comprometerse a participar en el proceso.
¿Qué son las técnicas de terapia conductual?
Para comprender cómo funciona la terapia conductual, es importante saber más sobre los principios básicos que contribuyen a la terapia conductual. Las técnicas utilizadas en este tipo de tratamiento se basan en las teorías del condicionamiento clásico y del condicionamiento operante.
Condicionamiento clásico
El condicionamiento clásico implica la formación de asociaciones entre estímulos. Los estímulos previamente neutrales se combinan con un estímulo que evoca una respuesta de forma natural y automática. Después de repetidos emparejamientos, se forma una asociación y el estímulo previamente neutral llegará a evocar la respuesta por sí solo.
El condicionamiento clásico es una forma de alterar el comportamiento. Varias técnicas y estrategias diferentes se utilizan en este enfoque de la terapia.
Terapia de aversión
Este proceso implica emparejar un comportamiento indeseable con un estímulo aversivo con la esperanza de que el comportamiento no deseado finalmente se reduzca. Por ejemplo, alguien con un trastorno por consumo de alcohol podría tomar Antabuse (disulfiram), un medicamento que causa síntomas graves (como dolores de cabeza, náuseas, ansiedad y vómitos) cuando se combina con alcohol.
Inundación
Este proceso consiste en exponer a las personas a objetos o situaciones que provocan miedo de forma intensa y rápida. A menudo se usa para tratar fobias. Durante el proceso, se impide que el individuo escape o evite la situación.
Desensibilización sistemática
En esta técnica, las personas hacen una lista de miedos y luego aprenden a relajarse mientras se concentran en estos miedos. Comenzando con el elemento que induce menos miedo y avanzando hasta el elemento que más miedo induce, las personas confrontan sistemáticamente estos miedos bajo la guía de un terapeuta. La desensibilización sistemática se usa a menudo para tratar fobias y otros trastornos de ansiedad.
Condicionamiento operante
El condicionamiento operante se enfoca en cómo se pueden utilizar el refuerzo y el castigo para aumentar o disminuir la frecuencia de un comportamiento. Es más probable que los comportamientos seguidos de consecuencias deseables vuelvan a ocurrir en el futuro, mientras que es menos probable que ocurran los seguidos de consecuencias negativas.
Las técnicas de terapia conductual utilizan refuerzo, castigo, formación, modelado y técnicas relacionadas para modificar el comportamiento. Estos métodos tienen la ventaja de estar muy enfocados, lo que significa que pueden producir resultados rápidos y efectivos.
Manejo de contingencias
Este enfoque utiliza un contrato formal por escrito entre un cliente y un terapeuta (o padre o maestro) que describe las metas, los refuerzos, las recompensas y las sanciones para el cambio de comportamiento. Los contratos de contingencia pueden ser muy efectivos para producir cambios de comportamiento ya que las reglas se explican claramente, evitando que ambas partes se retracten de sus promesas.
Extinción
Otra forma de producir un cambio de comportamiento es dejar de reforzar el comportamiento para eliminar la respuesta. Los tiempos muertos son un ejemplo perfecto del proceso de extinción. Durante un tiempo fuera, se retira a una persona de una situación que proporciona refuerzo. Al eliminar lo que la persona encontró gratificante, el comportamiento no deseado finalmente se extingue.
Modelado de comportamiento
esta técnica implica el aprendizaje a través de la observación y el modelado del comportamiento de los demás. En lugar de confiar simplemente en el refuerzo o el castigo, el modelado permite que las personas aprendan nuevas habilidades o comportamientos aceptables al observar a otra persona realizar las habilidades deseadas.
Economías de fichas
Esta estrategia se basa en el refuerzo para modificar el comportamiento. Los padres y maestros a menudo usan economías de fichas, lo que les permite a los niños ganar fichas por participar en comportamientos preferidos y perder fichas por comportamientos indeseables. Estas fichas se pueden canjear por recompensas como dulces, juguetes o tiempo adicional para jugar con su juguete favorito.
Los profesionales de la salud mental deben mantenerse actualizados con las últimas estrategias de tratamiento, La terapia cognitivo conductual TEAM tiene una base empírica y la capacitación en esta metodología hace que los terapeutas sean más efectivos para ayudar a sus pacientes a alcanzar sus objetivos de tratamiento.
En qué puede ayudar la terapia conductual
La terapia conductual se puede utilizar para tratar una amplia gama de afecciones y trastornos psicológicos, que incluyen:
- Trastorno bipolar.
- Trastornos por consumo de alcohol y sustancias.
- Ansiedad.
- Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH).
- Desórdenes del espectro autista.
- Trastorno límite de la personalidad (TLP).
- Depresión.
- Trastornos de la alimentación.
- Trastorno de pánico.
- Fobias.
- Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
La terapia conductual se centra en el problema y está orientada a la acción. Por esta razón, también puede ser útil para abordar problemas psicológicos específicos, como el manejo de la ira y el manejo del estrés.
Los tratamientos que incorporan técnicas conductuales generalmente se enfocan en producir resultados en un período de tiempo relativamente corto.
Eficacia
La eficacia de la terapia conductual depende de factores como el tipo específico de tratamiento utilizado y la afección que se está tratando.
En general, la investigación ha encontrado que aproximadamente el 67 % de las personas que prueban la psicoterapia experimentan algún tipo de mejora positiva.
Esto no significa que la TCC u otros enfoques conductuales sean los únicos tipos de terapia que pueden tratar las enfermedades mentales. Tampoco significa que la terapia conductual sea la opción correcta para cada situación.
Los trastornos de ansiedad, incluidos el trastorno de estrés postraumático (TEPT), el trastorno de pánico, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) y las fobias, por ejemplo, a menudo responden bien a los tratamientos conductuales. Sin embargo, los investigadores encontraron que la eficacia de la terapia conductual, específicamente La TCC, en el tratamiento de los trastornos por uso de sustancias, puede variar según la sustancia que se esté abusando.
También se demostró que la TCC tiene efectos beneficiosos sobre algunos síntomas de la esquizofrenia, pero no mostró beneficios sobre la recaída y el ingreso hospitalario en comparación con otras formas de tratamiento.
Cosas para considerar
La terapia conductual tiene una serie de ventajas. Sin embargo, los enfoques conductuales no siempre son la mejor solución.
No es suficiente para condiciones de salud mental complejas
Cuando se tratan ciertos trastornos psiquiátricos como la depresión severa y la esquizofrenia, la terapia conductual a menudo debe usarse junto con otros tratamientos médicos y terapéuticos. La terapia conductual puede ayudar a los clientes a manejar o hacer frente a ciertos aspectos de estas condiciones psiquiátricas, pero no debe usarse sola.
Es posible que no tenga en cuenta los problemas subyacentes
Los tratamientos conductuales tienden a centrarse en los problemas actuales de funcionamiento y es posible que no aprecien o aborden por completo los factores subyacentes que contribuyen a un problema de salud mental.
Puede que no aborde el panorama completo
Los enfoques conductuales se centran en que el individuo trabaje para cambiar sus comportamientos. Sin embargo, algunos de estos enfoques a menudo no abordan cómo las situaciones y las relaciones interpersonales pueden estar contribuyendo a los problemas de una persona.
Terapia conductual para niños
Tanto la terapia conductual aplicada como la terapia de juego se usan para niños. El tratamiento consiste en enseñar a los niños diferentes métodos para responder a las situaciones de manera más positiva.
Una parte central de esta terapia es recompensar las conductas adaptativas que benefician el funcionamiento del niño y desalentar las conductas desadaptativas, o aquellas que interfieren con el mejor funcionamiento posible del niño.
Esta terapia a menudo requiere que varias personas en el entorno del niño se comprometan con el proceso, incluidos los padres, los maestros y otras figuras importantes.
A los niños les puede tomar algún tiempo confiar en su consejero. Esto es de esperar.
Con tiempo, paciencia y enfoque en generar confianza, un niño puede calentarse hasta el punto de poder expresarse por completo. Esto también depende en gran medida de la edad del niño.
Los niños autistas con TDAH a menudo se benefician de la terapia conductual.
Cómo encontrar un terapeuta conductual
Encontrar un terapeuta puede resultar abrumador, pero hay muchos recursos que pueden facilitarlo.
Al buscar un terapeuta o profesional de la salud mental, puede elegir entre:
- Trabajadores sociales.
- Consejeros basados en la fe.
- Consejeros no basados en la fe.
- Psicólogos.
- Psiquiatras.
Debe asegurarse de que el terapeuta que elija tenga las certificaciones y títulos necesarios. Algunos terapeutas se concentrarán en tratar ciertas afecciones, como los trastornos alimentarios o la depresión.
Si no sabe cómo comenzar a buscar un terapeuta, puede pedirle una recomendación a un médico general, un médico que trata una amplia gama de afecciones. El médico general puede recomendarle un psiquiatra si es apropiado para usted.
Los psiquiatras pueden escribir recetas para medicamentos si creen que podría beneficiarse de ellos. La herramienta indicada, también puede brindarle opciones en su área si necesita ayuda para encontrar un terapeuta.
La mayoría de los planes de seguro cubrirán la terapia para las condiciones de salud mental. Algunos terapeutas ofrecen subvenciones u opciones de pago de escala móvil para personas de hogares de bajos ingresos.
Un terapeuta le hará muchas preguntas detalladas para evaluar con precisión sus inquietudes y formular un plan de tratamiento específico.
Sabrá que ha encontrado al terapeuta adecuado cuando se sienta cómodo hablando con él y esté experimentando las ganancias o mejoras que ha estado buscando. Es posible que deba reunirse con varios terapeutas antes de encontrar el adecuado.