Es probable que tenga buenos recuerdos de un viejo amigo, de charlar, reír y pasar tiempo con él. Puede que os hayáis distanciado con el paso del tiempo, pero de vez en cuando hay algo que te recuerda a ellos, haciendo que te preguntes cómo están.

Si has perdido el contacto con un amigo, no estás solo. Las personas tienden a perder el contacto con otras después de los 25 años. La vida puede interponerse en el camino, con horarios agitados, caminos diferentes, cambios de vida y grandes mudanzas que hacen difícil mantener el contacto con todas las personas de tu vida.

Si echas de menos a tu amigo y piensas en ponerte en contacto con él, puede que te preocupe si será como en los viejos tiempos, o si será incómodo e incómoda. Puede que te preguntes si tendréis algo de lo que hablar, si echan de menos vuestra amistad y quieren volver a ser amigos, o si hay resentimientos.

Este artículo trata de las ventajas de volver a conectar con viejos amigos, de las razones por las que puede resultar incómodo y de algunos consejos que pueden ayudarte a evitar cualquier incomodidad.

Ventajas de volver a conectar con viejos amigos

Estos son algunos de los beneficios de volver a conectar con un viejo amigo, según Sabrina Romanoff, psicóloga clínica y profesora de la Universidad de Yeshiva:

Revivir recuerdos felices

Pasar tiempo con un viejo amigo puede ayudarte a recordar y revivir recuerdos felices, aventuras y los fuertes lazos que habéis desarrollado en tiempos difíciles.

Ponerse en contacto con el pasado

Reavivar amistades de distintas épocas de tu vida puede ayudarte a reconectar con distintas partes de ti mismo. Los viejos amigos pueden recordarte la persona que solías ser y ayudarte a ponerte en contacto con partes de ti mismo que podrían haberse reprimido a lo largo de los años.

Ponerse en contacto con el pasado

Ofrecer una nueva perspectiva

Reconectar con viejos amigos puede ofrecerte una nueva perspectiva de tu vida actual, en relación a cómo era en el pasado. También puedes obtener una perspectiva del pasado de alguien que ha pasado por ello contigo.

Construir tu comunidad

Restablecer una amistad con un viejo amigo puede ayudarte a fortalecer tus raíces y a sentirte más arraigado en tu comunidad. Un sentimiento de conexión más profundo contribuye a mejorar el bienestar.

Razones por las que puede resultar incómodo

Por muy unidos que estéis tu amigo y tú, puede que ahora vuestra relación sea incómoda. Según el Dr. Romanoff, éstas son algunas de las razones por las que podría ser incómoda:

Sentimientos heridos

La gente a veces se toma como algo personal el distanciamiento de la amistad y le da una interpretación negativa a la distancia en la relación. Por ejemplo, pueden suponer que a la otra persona no le gusta lo suficiente como para seguir en contacto o que se ha distanciado a propósito. Sus sentimientos pueden estar heridos o pueden guardar rencor a la otra persona por no seguir en contacto.

Sentimientos heridos

Cambios en el tiempo

Volver a conectar también puede ser incómodo porque las personas cambian significativamente con el tiempo, y tu punto de referencia para tu antiguo amigo podría ser muy diferente de la persona que es hoy. Es posible que vuestras vidas hayan tomado caminos radicalmente diferentes desde que erais jóvenes, y puede ser un reto conectar sobre vuestro pasado compartido cuando vuestras vidas actuales son tan diferentes.

Comparaciones

Al reconectar con un viejo amigo del pasado, puede haber una tendencia a comparar situaciones presentes. Los temas negativos de celos, envidia o comparación social ascendente podrían dificultar la reconexión.

Consejos para evitar la incomodidad

El Dr. Romanoff sugiere algunos consejos que pueden ayudarle a prevenir cualquier incomodidad mientras se reconecta con un viejo amigo:

Acércate a través de las redes sociales

Conéctate con ellos a través de las redes sociales o de mensajes de texto si estás demasiado nervioso para hacer una llamada telefónica o para iniciar un encuentro. Sigue una de sus publicaciones más recientes para entablar una conversación sobre lo que está haciendo. Construye poco a poco una relación que te resulte natural.

Acercate a traves de las redes sociales

Muestra un poco de amor

Si te alegras de verdad de conectar con tu antiguo amigo, haz lo posible por comunicárselo. Sé cálido y afectuoso con ellos y hazles saber lo mucho que significan para ti. La calidez genuina puede ayudar a disipar parte de la incomodidad que puede acumularse en una relación.

Traiga a la memoria un buen recuerdo

Inicia la conversación sacando a relucir un recuerdo entrañable o un momento divertido que hayáis compartido. Os trasladará a los dos a ese momento en el que estabais unidos y ayudará a suavizar las conversaciones de “¿Qué haces ahora?” que a veces pueden ser rígidas.

Muestra tu interés

Mientras charlas con tu amigo, hazle saber que te interesa lo que está compartiendo contigo. Prestar atención, hacer preguntas de seguimiento y empatizar con ellos puede ayudarte a conectar con ellos y a conocer quiénes son actualmente.

Deja atrás los conflictos

No insistas en los conflictos o en las razones por las que tu amistad se alejó. Si surgen de forma natural más adelante, no dudes en abordar cualquier posible sentimiento herido. Pero, al principio, céntrate en lo que tienen en común y en los buenos momentos que han compartido.

Deja atras los conflictos

Haz planes para el futuro

Cuando termines la conversación o el encuentro con tu amigo, haz planes para el futuro basados en los intereses compartidos.

Reconectar con un viejo amigo puede suscitar muchas emociones, como la emoción, la nostalgia, la inseguridad y la incomodidad. Sin embargo, si tú y tu amigo sois capaces de superar la incomodidad, pueden reavivar su amistad basándoos en los momentos que compartiste en el pasado mientras se conocen en el presente.

Aprende todo para romper el hielo con las palabras correctas, mantener una conversación fluida e incluso tener el romance de tus sueños.

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Cómo afrontar la pérdida de una amistad

Las amistades son uno de los vínculos más importantes que una persona puede encontrar. Cuando tienes un amigo, tienes a alguien con quien capear los días buenos y malos. Un amigo hará planes para una noche de cine entre semana para animarte y se quedará despierto para planear las aspiraciones de los objetivos del nuevo año en equipo.

Sin embargo, aunque la amistad es innegablemente importante, los amigos no siempre forman parte de nuestra vida. No importa si un amigo ha sido una presencia constante durante décadas o sólo unos meses: pueden entrar en juego diferentes factores que hagan que su conexión llegue a su fin.

Hay diferentes razones por las que una amistad puede llegar a su fin. Del mismo modo, la pérdida de un compañero apreciado en tu vida puede provocar diferentes reacciones. Esta guía analizará las razones por las que las amistades pueden fracasar y las formas adecuadas de manejar la pérdida de un amigo.

Por qué se acaban las amistades

Los amigos no son sólo una cómoda compañía durante los eventos sociales o un sistema de apoyo durante los momentos difíciles. Un amigo puede proporcionar la misma cantidad de ánimo y satisfacción emocional que los miembros de la familia. Por eso, la disolución de una amistad puede resultar tan dolorosa como el desamor.

Hay diferentes razones por las que una amistad puede llegar a su fin. A continuación, se analizan estas situaciones.

Se superan mutuamente

En circunstancias normales, una amistad suele comenzar con intenciones inocentes. Estos vínculos suelen forjarse en un terreno común: gustar de los mismos programas de televisión, disfrutar de tipos de música similares o incluso participar en aficiones comunes.

Es poco probable que las amistades exijan demasiado y se basan en personas que simplemente disfrutan de la compañía de los demás.

Sin embargo, como dice el refrán, 20 amigos no pueden jugar durante 20 años. Hay momentos en los que los compañeros se superan mutuamente.

A veces, los intereses que iniciaron la relación son incapaces de mantenerla. En otros casos, las amistades se desvanecen porque lo que inicialmente comenzó como un terreno común, ha evolucionado hacia cosas diferentes entre los amigos.

Una pelea rompe la relación

Como seres humanos, nuestras diferencias son una de las cosas que nos hacen pintorescos e interesantes. Un mundo en el que todo el mundo piensa y siente lo mismo parecerá monótono y aburrido.

Con los amigos, se aplica el mismo principio. Las amistades enseñan a acomodar los diferentes sistemas de creencias. Son uno de los primeros puntos en los que se resuelven los conflictos de forma práctica.

Sin embargo, aunque se fomentan las diferencias, hay algunos desacuerdos que no pueden resolverse tan fácilmente. Cuando los amigos tienen puntos de vista diferentes sobre asuntos que son fundamentales para sus formas de vida, estos puntos de vista pueden impedir que la amistad progrese.

Asimismo, cuando se produce una traición, la amistad puede ser incapaz de sobrevivir al dolor.

La distancia complica las cosas

Parte de la belleza de la amistad se encuentra en hacer cosas juntos. Cocinar con un amigo, trabajar codo con codo en un proyecto a largo plazo, ir juntos de aventuras el fin de semana… son las pequeñas alegrías de tener un amigo.

Pero la vida cotidiana conlleva complicaciones. Las mudanzas por motivos de trabajo, matrimonio, viajes y otras razones pueden poner a prueba la amistad.

Aunque no falta el amor entre amigos que se encuentran en diferentes partes del mundo, esta distancia puede contribuir a reducir la comunicación. En última instancia, las amistades pueden terminar cuando ha pasado demasiado tiempo y han ocurrido demasiados acontecimientos lejos de un compañero que antes era querido.

La distancia complica las cosas

Las expectativas pueden cambiar

Las amistades adoptan diferentes formas. Puede haber conexiones de bajo mantenimiento, en las que los amigos están contentos de comunicarse y ponerse al día de vez en cuando. Si este tipo de amistad termina, puede que no duela tanto.

Otras veces, las amistades pueden ser más intensas. En este caso, los amigos están en constante comunicación y son habituales en la vida del otro. Éstos tienden a participar en las actividades cotidianas y suelen esperar lo mismo de las personas que consideran amigos.

Cuando los amigos tienen expectativas fijas de sus compañeros, esto puede crear cierta tensión. El emparejamiento de amigos de bajo y alto mantenimiento puede ser difícil. Esto se debe a que una mitad puede considerar que la otra hace demasiado, mientras que la otra sigue convencida de que se puede hacer más para fomentar la amistad. Cuando las expectativas chocan constantemente, esto puede poner fin a la amistad.

Cómo afrontar la pérdida de un amigo

El valor de un amigo puede ser inconmensurable. Tener una persona a la que recurrir en los momentos más oscuros, alguien con quien reírse y reflexionar sobre los misterios de la vida puede provocar un salto positivo en el bienestar. Esta conexión social es tan importante que puede ayudar a conservar la vida en la vejez.

Cuando se pierde a un amigo, el dolor puede ser profundo. Ahora está fuera de tu alcance una persona en la que podías confiar y en la que podías confiar para que apareciera por ti. Para gestionar esta pérdida, he aquí algunos pasos a seguir.

Aprende a priorizarte a ti mismo

Cuando se pierde a un amigo, es fácil dejarse llevar por el dolor de la pérdida. Esto puede suponer un periodo importante de duelo por los momentos felices, lo que puede ser poco saludable para el bienestar.

Dejarse llevar por el impacto de la pérdida de un amigo es admirable e incluso recomendable. Sin embargo, esto no debe convertirse en el statu quo. Salir a pasear, hacer ejercicio, aprender sobre la vida con la pérdida, puede ponerle en un mejor estado de ánimo para gestionar la ausencia de un amigo.

Reforzar el vínculo con otros amigos

La pérdida de un amigo puede ayudar a resaltar la importancia de otros presentes en su vida. Si tu comunidad social incluye amigos que se implican en tu crecimiento y felicidad, es un buen momento para mostrar tu agradecimiento.

Pase tiempo con estos amigos y alimente su relación. Ahora es un buen momento para hacer un balance de cómo hacer crecer su amistad.

Reforzar el vinculo con otros amigos

Habla con un terapeuta

Aunque las amistades nunca se elevan a la posición de las relaciones románticas, esta conexión puede ser igual de importante. Por ello, puede ser difícil lidiar con el dolor y el aislamiento que puede seguir a la pérdida de un amigo en su vida.

Buscar la orientación de un experto puede ayudar a navegar por el dolor y los cambios que seguirán a la vida sin su amigo.

Perder a un buen amigo es una de las situaciones más difíciles de manejar. Por eso las rupturas de amistad pueden sentirse como un dolor inesperado en las tripas.

Para superar la pérdida de un amigo, centrarse en uno mismo y en las amistades existentes es un paso positivo en la dirección correcta.

Asimismo, los consejos de los expertos pueden ayudar a gestionar y superar los retos de la pérdida de un amigo.

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