Ese sentimiento de agrado y cariño, llamado afecto, es importante en las relaciones románticas y familiares.

Las personas demuestran su afecto de diversas maneras. Aunque a algunas personas les cuesta mostrar afecto, es una habilidad importante que hay que desarrollar para poder demostrar a tus seres queridos que te importan.

Una de las principales razones por las que las parejas acuden al asesoramiento es que uno o ambos se sienten poco queridos.

Muchas personas -sobre todo las que llevan mucho tiempo con su pareja y han hecho las cosas de la misma manera durante un tiempo- acuden en busca de ayuda porque sienten que su pareja nunca les expresa aprecio o afecto y, como resultado, no se sienten queridos o atendidos.

Pero, a menudo, el problema tiene que ver tanto con la forma de expresar el afecto como con cualquier otra cosa.

Todos tenemos diferentes formas de demostrar a alguien que nos importa. Esto podría llamarse su “lenguaje del amor”.

Este artículo define el afecto, explica por qué es importante en las relaciones, cómo es el comportamiento afectuoso y cómo las muestras de afecto pueden mitigar los conflictos en las relaciones. Este artículo también cubre los posibles aspectos negativos del afecto y cómo el afecto se relaciona con los cinco lenguajes del amor.

¿Qué es el afecto?

El afecto es el cariño que se siente por otra persona. El término describe un vínculo tierno entre las personas.

Es un vínculo especialmente importante para los bebés y sus cuidadores. Comienza cuando somos pequeños y deseamos estar cerca de nuestros padres. La teoría del apego se centra en el profundo vínculo que se inicia con nuestros primeros cuidadores y que nos permite mantener relaciones saludables con otras personas a lo largo de nuestra vida.

¿Por qué es importante el afecto?

Aunque algunas personas son introvertidas o prefieren un estilo de vida menos social, los seres humanos no se desenvuelven bien en el aislamiento, por lo que las conexiones significativas son inestimables. Estas conexiones pueden establecerse con amigos, miembros de la familia o una pareja romántica.

Puedes demostrar y afirmar tu amor por los demás mostrando afecto.

¿Cómo es el comportamiento afectuoso?

Aunque el afecto puede llevar a la intimidad, suele ser un gesto no sexual. Cuando quieres expresar tu sentimiento de cercanía a alguien, puedes comunicar el afecto a través de una serie de comportamientos. Por ejemplo, puedes pellizcar juguetonamente la mejilla de tu sobrino.

Los signos de afecto pueden variar según la cultura. Por ejemplo, en Francia, los amigos se saludan besando ambas mejillas. A dos amigos estadounidenses les resulta más cómodo chocar los cinco o abrazarse.

El afecto también se demuestra a través de la comunicación. Por ejemplo, puedes llamar a alguien para decirle que estás pensando en él.

Como es el comportamiento afectuoso

Ejemplos de comportamiento afectuoso

Otras formas de demostrar afecto son (pero no se limitan a) las siguientes:

  • Abrazar.
  • Besar.
  • Cogerse de la mano.
  • Acariciar la espalda de alguien.
  • Pasar el brazo por el hombro o la cintura de otra persona.
  • Enviar tarjetas y regalos.
  • Tranquilizar a alguien cuando está deprimido.
  • Hablar de los aspectos positivos de la relación.
  • Ofrecerse a estar ahí si alguien está deprimido.
  • Hacer una broma si usted y un ser querido están en desacuerdo.

El afecto puede mitigar los conflictos

El afecto puede ser una fuerza positiva incluso cuando no estás de acuerdo con alguien con quien estás profundamente conectado. También puede ser una herramienta saludable para reducir los subproductos negativos del conflicto, como la ansiedad y el estrés.

Un estudio reciente exploró cómo se sentían los adolescentes amados por sus padres a diario. Los resultados mostraron que, independientemente de la cercanía entre padres e hijos o del conflicto en cuestión, cuanto más afecto mostraban los padres ese día, más decían los adolescentes que se sentían amados. Antes, durante o después del conflicto, los adolescentes necesitan el calor de sus padres.

Otro estudio de investigación analizó a las parejas adultas y sus niveles de cortisol durante un conflicto. Los científicos grabaron en vídeo sus comportamientos positivos (incluyendo el humor y el afecto) y los negativos (incluyendo la frustración, el desprecio y la actitud defensiva) durante las interacciones conflictivas.

Los que experimentaron más comportamientos positivos durante los desacuerdos mostraron un patrón más saludable de cortisol. Entre los comportamientos positivos, el afecto fue el que más influyó en las variaciones de cortisol.

¿Qué pasa si su ser querido no es afectuoso?

Algunas personas no han sido educadas para mostrar sus sentimientos por razones culturales o sociales. Otras simplemente no se sienten cómodas expresándose de esa manera. Para ellos puede ser un signo de debilidad o miedo a revelar demasiado.

Por ejemplo, todavía hay mucha presión sobre los hombres para que sean machistas y no muestren sus sentimientos. Esto se suele llamar masculinidad tóxica. Esta presión para ser fuerte en todo momento les hace mucho más que bien a ellos y a sus seres queridos.

No hay que ofrecer grandes gestos ni exagerar con las muestras de afecto en público. Pero, demostrar que te importa en pequeñas formas, incluso no físicas, puede ayudar a que tu relación prospere.

Si hay alguien en tu vida de quien no recibes suficiente afecto, es una buena idea plantear tus necesidades y explicar por qué el afecto es importante para ti. A continuación, pregúntales si son capaces de mostrar más afecto.

Si se sienten incómodos con el afecto y tienen problemas para mostrarte afecto, entonces podría ser el momento de solicitar la ayuda de un consejero de relaciones.

Cómo influye la autoestima en el afecto

Tener una alta autoestima significa que nos valoramos a nosotros mismos. Si tienes una autoestima sana, es probable que seas capaz de afrontar mejor que otros los contratiempos de la vida. También es posible que tenga un mayor comportamiento prosocial y sienta que es digno de dar y recibir amor.

Por lo tanto, quienes tienen más confianza en abrirse a sus parejas y tienen una autoestima sana son más propensos a expresar elementos de afecto.

Un estudio reciente se propuso determinar si ocurría lo contrario: ¿expresaban menos afecto con sus parejas en las relaciones románticas quienes eran más vulnerables y tenían una baja autoestima? Los resultados confirmaron que sí.

Los que tenían una autoestima más baja expresaban menos afecto y también “experimentaban reacciones emocionales, cognitivas y fisiológicas menos positivas al hacerlo “4. Las personas con baja autoestima también subestimaban los beneficios del afecto y actuar de forma afectuosa aumenta la satisfacción de la relación.

Tener una alta autoestima significa que es probable que des afecto y te sientas digno de recibirlo. Si tu sensación general de autoestima es positiva y te sientes merecedor de cosas buenas, es más fácil aceptar un gran abrazo o un cumplido.

En este módulo aprenderá a detectar el origen de la rabia -esa sensación de querer dar un grito o una patada- y los factores que la mantienen viva aunque hayan pasado años. También Aprenderás a liberar la culpa y la vergüenza de situaciones antiguas, en las que ya no se puede cambiar nada, pero sigues recordándolas y sintiéndote mal.

En este módulo recibirás una explicación completa del Apego -basada en la teoría de Bowlby-Ainsworth con los aportes recientes de Crittenden- desde la infancia hasta la adultez, así como una explicación de su influencia en las relaciones. Finalmente, incluye una descripción de las personalidades dañinas (la tríada oscura) y cómo reconocerlas y defendernos de ellas.

¿El exceso de afecto puede ser una señal de alarma?

El afecto puede darse por razones equivocadas. Alguien puede ser demasiado cariñoso porque quiere tener relaciones sexuales. O alguien puede abusar del afecto porque te está manipulando, es decir, fingiendo que sus intenciones son para siempre, cuando sólo está centrado en una noche.

El tipo supremo de manipulación es cuando alguien te colma de afecto, regalos y atención excesivos, todo lo cual puede ser signo del acto más peligroso de bombardeo amoroso.

¿Dónde aprendemos nuestro “lenguaje del amor”?

La forma en que expresamos nuestro afecto suele estar muy influenciada por lo que aprendimos al crecer. Si a tu familia le gustaba pasar mucho tiempo juntos, por ejemplo, es posible que valores lo mismo en tu pareja. Si te avergüenza expresar tus sentimientos verbal o físicamente, esto puede continuar en la edad adulta. Pero no hay reglas estrictas: podemos elegir hacer las cosas de forma diferente en nuestras relaciones adultas. Al final, expresamos el afecto como lo hacemos porque es lo que tiene más sentido para nosotros.

El afecto y las cinco lenguas del amor

¿Cómo sabes qué tipo de afecto es el más significativo para tu pareja? Si no estás seguro, puedes consultar los cinco lenguajes del amor para saberlo.

Los cinco lenguajes del amor describen cinco formas de expresar y recibir amor. La idea es que disfrutamos de todos estos lenguajes, pero una persona suele hablar, o apreciar, uno o dos de estos lenguajes más que el otro.

Los lenguajes del amor son:

  • Palabras de afirmación.
  • Tiempo de calidad.
  • Tacto físico.
  • Actos de servicio.
  • Recibir regalos.

Una vez que conozcas el lenguaje del amor de tu pareja, podrás demostrar tu afecto de forma significativa. Puede que te des cuenta de que besarle (contacto físico) significa más para él que decirle que es una gran persona (palabras de afirmación). Quizá pasar la tarde con un ser querido montando en bicicleta (tiempo de calidad) signifique más para él que un costoso regalo de cumpleaños (recibir regalos).

En general, mostrar y recibir afecto es un aspecto importante de cualquier relación sana. Así que, si no está seguro de cómo expresarlo, pruebe con sus seres queridos algunos de los consejos que se han tratado en este artículo. O pregúntales cómo les gusta recibir afecto. Puede que estas conversaciones sean incómodas, pero sólo servirán para establecer conexiones más profundas y duraderas con las personas especiales de tu vida. Si el exceso de afecto o la falta del mismo está afectando negativamente a tus relaciones, habla con un consejero sentimental, ya que puede ayudarte a encontrar formas de comunicar eficazmente tus necesidades con los demás.

Cuando se hablan idiomas diferentes

Si tú y tu pareja habláis diferentes “lenguajes del amor” sin daros cuenta, es cuando puede haber lugar a la falta de comunicación, y a la insatisfacción.

Ambos pueden acabar sintiendo que el otro no dice ni hace nada para demostrar que le importa, y pueden acabar preguntándose si le importa en absoluto.

Por ejemplo, si alguien valora mucho los actos amables, pero la forma que tiene su pareja de expresar su amor es, por ejemplo, comprando regalos, puede sentir que no está satisfaciendo sus necesidades. Del mismo modo, su pareja puede sentir que el ramo de flores que compró el otro día era una forma muy bonita de demostrar su cariño, pero se sintió defraudada por la reacción de su pareja.

Con el tiempo, este tipo de falta de comunicación puede abrir una brecha en la relación. Ambos miembros de la pareja pueden empezar a sentir que están haciendo todo lo que pueden, pero que todavía no es suficiente para hacer feliz al otro. Como resultado, pueden empezar a sentirse amargados y resentidos.

¿Cómo se puede abordar esto?

Para que una relación sea saludable, ambos deben comprender las necesidades del otro.

Es posible que tú y tu pareja tengáis que explorar cómo os sentís más cómodos expresando -y recibiendo- afecto.  Si crees que esta conversación puede ser difícil, puedes pensar en lo siguiente:

Dale tiempo y espacio

No intentes hablar cuando uno de los dos esté ocupado, cansado o preparándose para salir. Reserva un momento en el que puedas charlar sin interrupciones. También puede ser una buena idea elegir un entorno agradable y cómodo: en el salón con una taza de té, por ejemplo.

Céntrate en los sentimientos

Puedes utilizar mucho el lenguaje del “yo”: “A veces siento”, “No siempre sé cómo”¦” en lugar del lenguaje del “tú”: “A menudo me haces sentir”, “Parece que nunca”. De este modo, te responsabilizas de tus emociones y es menos probable que tu pareja se sienta acusada de algo.

Empieza por lo positivo

 A veces, puede ayudar empezar centrándose en lo que te gusta de la relación: “Me encanta que podamos confiar el uno en el otro para las cosas importantes, pero esperaba que pudiéramos hablar de algunas cosas del día a día”. Esto puede hacer que las cosas empiecen de forma más positiva y ayudar a tu pareja a entender que no estás tratando de aprovecharte de ella.

Para muchas parejas, descubrir que ellos y su pareja hablan lenguajes del amor diferentes es un verdadero momento de iluminación. Puede que se sientan muy distanciados, pero de repente se dan cuenta de que se quieren, sólo que los mensajes no han llegado.

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