Los amigos añaden una dimensión maravillosa a nuestras vidas: nos ayudan a celebrar los buenos momentos y a superar los tiempos difíciles. Tener una red social fuerte y solidaria se ha asociado con niveles más bajos de estrés, mayor longevidad y mayores niveles de felicidad.

Desgraciadamente, las relaciones conflictivas pueden aportar una cantidad significativa de estrés a nuestras vidas, y el estrés puede ser continuo. Aprender a minimizar ese tipo de estrés mientras se mantiene la mayor cercanía posible puede ser difícil, pero lidiar con relaciones volátiles puede ser aún más difícil. Por lo tanto, el tiempo dedicado a centrarse en cómo maximizar los aspectos positivos de sus relaciones y minimizar el peaje del conflicto es tiempo bien empleado.

Los siguientes recursos pueden ayudarte a crear sistemas de apoyo más sólidos entre tu grupo de amigos y a minimizar el estrés que te produce el “drama” innecesario.

¿Qué amigos conservar?

Es útil que dejes de lado el mito de que debes mantener el contacto con el 100% de las personas que conoces. Eso no es realista y no deberías convertirlo en tu objetivo de socialización. No puedes mantener el contacto con miles de personas.

La pregunta que deberías hacerte es: “¿Qué tipo de amigos quiero mantener?”.

La respuesta a esa pregunta debería estar en consonancia con lo que más valoras: los amigos con los que mejor te llevas, aquellos con los que sientes una estrecha conexión, los que te hacen sentir que importas, los que te hacen sentir comprendido, los que estarán ahí cuando los necesites y a los que puedes confiar tus secretos más íntimos.

Estas son las cualidades de un buen amigo. Si por casualidad conoces y te haces amigo de personas así, no deberías perderlas. Este es el tipo de amistades que debes conservar y mantener.

Por lo general, también querrás mantener amigos que tengan intereses y opiniones generales sobre la vida similares a las tuyas. Las personas con las que compartes intereses comunes probablemente serán tus mejores amigos en el futuro. Si no, pueden convertirse en colegas con los que compartirás ideas. En cualquier caso, aprecia a aquellos que conoces y con los que tienes mucho en común.

¿Qué hace que se rompa una amistad?

Hay muchos factores que pueden hacer que se pierdan amigos. A veces, simplemente no puedes hacer nada al respecto. Circunstancias como una mudanza, nuevas obligaciones familiares (piensa en el matrimonio o los hijos) o incluso cuestiones relacionadas con el trabajo que obligan a tus amigos a socializar menos son situaciones que pueden ocurrirle a cualquiera.

Otra razón por la que puedes romper con un amigo son los conflictos no resueltos. Tú o tu amigo no os ponéis de acuerdo en un asunto. Uno de vosotros ha hecho algo y se niega a disculparse, o tal vez no estáis de acuerdo en quién tiene la culpa. A veces, se trata de simples celos entre amigos.

Otra razón por la que podéis perder amigos es que empezáis a tener cada vez menos cosas en común. A medida que los dos crecéis individualmente, también adquirís más conocimientos y habilidades. Los conocimientos y habilidades que adquieres no siempre coinciden con los de los demás. Por ello, cada vez tenéis menos ganas de salir juntos.

Otras veces, tú o tu amigo sois demasiado pegajosos o demasiado distantes. A veces hay una diferencia entre cuánto “espacio” necesitas en la amistad y cuánto quiere la otra persona. Si es demasiado diferente, puede ser difícil mantener la amistad. Un amigo puede querer compartir muchas actividades y tal vez compartir todos sus secretos, mientras que el otro quiere estar menos involucrado.

Cómo ganar amigos y también influir sobre las personas, el superventas de Dale Carnegie, es una obra indispensable en el campo del desarrollo personal. Lejos de estar pensada para emplearse única y solamente en el campo empresarial, la obra le ofrece al mundo entero un modelo de comportamiento social cuyo objetivo no es solo establecer nudos de amistad, sino más bien asimismo hacer que estos den frutos merced a un interés común y grupal.

Lo que puedes hacer para conservar a tus amigos

Dicho esto, hay cosas claras que puedes hacer para conservar a tus amigos en lugar de perderlos. Estas son las condiciones que deben cumplirse para que la amistad se mantenga. Una vez que se cumplen estas condiciones, tienen que seguir así.

Sí, las amistades tienen que mantenerse para que sigan vivas. A menudo es una relación FRAGIL. La amistad, al ser una relación suelta (no como el romance o los negocios) necesita un cuidado más consciente de lo que suponemos.

Sea como sea, debes tratar la amistad como lo harías con cualquier forma de relación. Si no quieres que fracase, debes tratarla bien. Si quieres conservar y mantener las amistades que tienes ahora, toma nota de estos consejos.

No todo el apoyo social se crea igual. Esto es lo que necesita saber para crear amistades de apoyo mutuo, duraderas y verdaderamente sanas que le aporten apoyo, la oportunidad de crecimiento personal y beneficios para el control del estrés. Descubra por qué es importante desarrollar la capacidad de escuchar, su intuición, la asertividad y otras habilidades que pueden dar sus frutos con un mayor apoyo social, amistades sanas y un sentido de pertenencia.

Numerosos estudios de investigación han demostrado que las amistades solidarias pueden proporcionar ayuda emocional en momentos de estrés e incluso mejorar nuestra salud y aumentar la longevidad. Conozca los numerosos beneficios para el manejo del estrés y la salud que proporciona un círculo de amigos, y descubra cómo empezar a ampliar su número de amistades solidarias.

Siga teniendo interacciones que mantengan la amistad

Sigue interesándote por lo que hacen. Comparta con ellos sus propios intereses. Si tienen un nuevo interés o afición, alégrate y ponte contento por ellos. Además, anímale a probar otras cosas. Sigue divirtiéndote con ellos. Hagan cosas divertidas juntos. Mantén vivo ese ambiente de ocio. Tú y tus amigos debéis descansar del día a día de vez en cuando.

Sigan hablando y compartiendo vuestras historias sobre el trabajo, la familia, las relaciones y el día a día. Parece sencillo, pero en parte en eso consiste la amistad: en compartir la vida. Hablar de tus experiencias en detalle. Conocerse más profundamente a través de las historias. Cuanto más sepáis el uno del otro, más fuerte será vuestro vínculo.

Otra cosa que puedes hacer con tus amigos es encontrar un nuevo pasatiempo que os guste hacer juntos. Si hay algo que tú y tus amigos no han hecho y han querido hacer, ¡hacedlo ahora! Incluso si sólo eres tú quien se muere por hacer algo nuevo, llévalos contigo. Hacer cosas nuevas juntos es una buena forma de mantener la amistad.

Interactúa con tus amigos de una manera que sea significativa y fructífera y podrás conservar y mantener mejor tu amistad.

Mantenga las interacciones frecuentes

Este factor es el 80% del juego cuando se trata de mantener las amistades: mantener el contacto.

Para mantener a un amigo o a un grupo de amigos durante mucho tiempo, tienes que verlos o hablar con ellos con una frecuencia aceptable. Si están en la ciudad, intenta quedar con ellos de vez en cuando, sobre todo si quieres mantenerlos como amigos íntimos. Los amigos ocasionales pueden quedar con menos frecuencia. Para tu círculo íntimo, las personas con las que más sales, recomiendo una vez a la semana; o dos veces al mes si no puedes hacerlo cada semana.

En el caso de las amistades a distancia y los conocidos ocasionales, te recomiendo que te pongas en contacto con ellos al menos dos veces al año. Aprovecha la oportunidad para ponerte en contacto con ellos en su cumpleaños o en otros acontecimientos importantes. Llama si puedes. No te limites a dejar un mensaje en su perfil de Facebook.

Algunas amistades pueden sobrevivir, aunque no veas/escuches a la persona tan a menudo. Es el caso de que hayáis pasado un gran tiempo juntos y sientas que os une un gran vínculo. Incluso en ese caso, no está de más contactar de vez en cuando.

Dedica entre media hora y una hora cada semana a “estar en contacto” con tus amigos. Conviértelo en un hábito, así es más fácil. En pocas semanas de hacerlo, te darás cuenta de la importancia de tus amigos y de cómo hacen tu vida más divertida.

Mantenga las interacciones frecuentes mantener amistades

Comunicación asertiva

La asertividad es una habilidad que no sólo ayuda en el matrimonio y las relaciones interpersonales, sino en todas sus relaciones. Puede reducir el estrés y ayudarle a conseguir un mayor equilibrio en casa, en el trabajo y en la vida. La asertividad establece límites saludables y reduce el estrés para todos. Aprenda más sobre la asertividad, la agresividad y la pasividad, y vea cómo el entrenamiento en asertividad puede mejorar su vida.

La clave de la asertividad no es hacer valer más tus derechos, sino hacerlos valer de una manera no tímida pero no agresiva que muestre respeto por ti mismo y por la otra persona.

No alejes a tus amigos sin motivo

Una amistad casual puede convertirse en una amistad íntima. Sin embargo, para ello hay que gustar más al otro, compartir más información personal, abrirse más, ser más íntimos y apoyarse emocionalmente.

Si tienes una razón legítima para NO hacer eso con un amigo (no tienes tiempo, ya tienes suficientes amigos cercanos, no confías del todo en ellos, etc.) entonces está bien, no tienes que dejar que la amistad “escale”.

Si no tienes ninguna razón para mantener la amistad de forma casual, entonces no impidas que ocurra. Si un amigo se involucra más en la relación, y tú sientes que también quieres hacerlo, aprende a no rehuirlo. Ve paso a paso. Desarrolla la confianza con esa persona; de nuevo, paso a paso.

Una vez que te inviten a su casa, intenta replicar. Si te presentan a sus familias, intenta hacer lo mismo. Si te presentan a sus familias, intenta hacer lo mismo.

Si no replicas, el otro amigo puede asumir que no estás interesado en una amistad estrecha y podría dejar de invertir en ti. No hay nada malo en optar por una amistad casual, pero al menos hazlo conscientemente; no alejes a tus amigos sin motivo. De hecho, esfuérzate por fortalecer tu relación con ellos.

Sé más abierto con tus amigos

Esto puede llevar tiempo, pero ser más abierto con tus amigos es algo por lo que deberías esforzarte. Si no puedes ser abierto con tus amigos, siempre los tendrás dudando de ti. Esto conduce a la frustración y a la duda. Esos son dos elementos que no quieres en tus amistades si quieres que duren.

Hay dos maneras de ser más abierto con tus amigos. Una es permitirte ser un poco vulnerable. Esto no significa que debas ser siempre como un libro abierto, pero tus amigos deben poder verte como persona, tanto en sus aspectos buenos como en los no tan buenos.

Un verdadero amigo te admirará por tus puntos fuertes y te comprenderá por tus defectos. No deberías dudar en exponer ambas cosas a los amigos que valoras.

Otra forma de ser abierto con tus amigos es decir siempre lo que piensas. Si tienes opiniones sobre cualquier asunto, incluso si se trata de ellos, especialmente si se trata de ellos, házselo saber. No dejes que esos pensamientos se embotellen dentro de ti. Tus amigos te apreciarán más si eres capaz de decir lo que piensas.

Si ves que tu amigo hace algo bien, házselo saber en agradecimiento. Si hace algo mal, sé sincero. De este modo, estarás siendo un buen amigo y es una de las mejores maneras de conservar y mantener tus amistades.

Dejar de lado las relaciones que te estresan

Dejar ir una relación nunca es fácil. Ganamos tanto con los amigos y los seres queridos, que a menudo nos aferramos a relaciones que ya no son buenas para nosotros por costumbre o por lealtad.

Lee por qué las relaciones negativas pueden perjudicarte y encuentra un plan paso a paso que te ayudará a decidir dónde poner el límite para dejar ir una relación que ya no es buena para ti.

Cómo mejorar tus relaciones con una comunicación sana

El apoyo social es un gran alivio del estrés, pero las relaciones también pueden ser una fuente importante de estrés. El conflicto dentro de una relación puede crear estrés emocional, así como nuevos obstáculos y retos que afrontar en tu vida si el conflicto dentro de una relación se extiende para crear conflictos en varias relaciones o dentro de un grupo. Dado que los conflictos son prácticamente inevitables en cualquier relación, a continuación, se ofrecen diez consejos importantes para gestionar los conflictos de forma respetuosa y con resultados positivos, en lugar de dañar la conexión y causar más estrés.

Las diez peores formas de gestionar los conflictos

La sabiduría convencional (y la investigación) dice que una buena comunicación puede mejorar las relaciones, aumentando la intimidad, la confianza y el apoyo. Lo contrario también es cierto: una mala comunicación puede debilitar los vínculos, creando desconfianza e incluso desprecio. He aquí algunos ejemplos de actitudes y patrones de comunicación negativos e incluso destructivos que pueden estropear una relación. ¿Cuántos de ellos te suenan a algo que harías tú?

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